Nuestra mente es el resultado del trabajo que hace nuestro cerebro detrás del telón de la gran obra de teatro que nuestra vida es. Cada actividad que realizamos y cada decisión que tomamos están ya creadas en nuestro cerebro con anterioridad, por la gracia divina de todas las experiencias y pensamientos que hemos plantado y regado a través de la historia de nuestra increíble vida.
Es impresionante como sin darnos cuenta nos dejamos llevar por toda esa información acumulada en nuestro interior, dentro del organismo más poderoso de nuestro cuerpo ya que con una sola decisión puede llevarnos a crear una vida miserable, una vida ordinaria o una vida plena llena de felicidad y prosperidad. Uno puede llegar a pensar que hay personas que por su status financiero y pareciera de éxito profesional deben de tener una vida llena de felicidad, sin dolor y sin pesares. La verdad es que todo ser humano está programado biológicamente para sentir placer y dolor, y nada nos puede hacer escapar a esos estados pasajeros o en algunos casos más profundos que nos llevan experiencias que no fueron planeadas en nuestras vidas, como la pérdida de un ser vivo o la perdida de uno mismo en el mundo en que vivimos.
Nuestro cerebro es uno de los órganos más pequeños en nuestro cuerpo y uno de los que más energía consume en proporción. Hay que entender que nuestro cerebro tiene una capacidad mínima para poder enfocarse en una serie de actividades al mismo tiempo. Contra mas puntos de enfoque le damos como trabajo a nuestro cerebro, a nuestra mente, mas energía consumimos y menos efectiva esta se vuelve, generando una baja precisión, bajo de nivel de memoria y de rendimiento.
Está demostrado científicamente que la única manera de maximizar nuestra capacidad mental es concentrándonos en una cosa a la vez, ya que cuando queremos realizar múltiples tareas a la vez, especialmente si estas son algo novedoso,, estaremos forzando al cerebro a realizar una tarea que no es capaz de hacer. La única manera de realizar múltiples tareas en periodo de tiempo es dándoles un tiempo específico a cada una y así dejando al cerebro, mente, libre de pensamientos y necesidad de enfoque en otros pensamientos que tienden a utilizar energía ara ser mantenido en mente.
Debemos ser conscientes de nuestras capacidades biológicas, especialmente mentales, para así darnos la garantía de maximizar nuestro cuerpo y mente para poder ser más claros y coherentes a la hora de decidir el camino a seguir en nuestra vida. Cuando respetamos los límites del cerebro y creamos herramientas externas para maximizar su uso nuestras habilidades personales se multiplican. Lo interesante que es seguimos siendo las mimas personas físicamente, sin embargo nuestra capacidad ha cambiado totalmente y esto en consecuencia crea niveles altos de confianza que facilitan el tomar las acciones que deseamos tomar.
Respetemos nuestro cerebro y multipliquemos nuestra capacidad mental concentrándonos en lo que es importante en el ahora, en el presente.
Deseándote éxitos y bendiciones.
Marc Miró
ContinuAvanzando
Marc Miró – enfocado en la transformación personal a través de facilitar el desarrollo de auto-liderazgo para así crear las bases del éxito personal
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