Hay épocas donde el ser humano se transforma en algo que posee pero que raramente utiliza, la compasión, la comprensión y el compartir se vuelven la tónica del periodo de las festividades navideñas, un periodo donde el corazón se siente relajado y donde nuestra energía emocional, espiritual y creativa llega a niveles a los que no se llegan durante el resto del año ¿Por qué nos cuesta tanto el mantener un tipo de energía que facilitaría no solo crear un mejor mundo pero crear una mejor vida para nosotros? Cada uno de nosotros probablemente tiene alguna respuesta diferente basado en nuestras experiencias personales, lo que observamos y la información que nos es compartida por medios de comunicación cuyo interés en muchos casos es crear confusión en vez de claridad.
Nuestro miedo a ser vulnerables es la causa de dejar que la energía de un mundo basado en el control del ser humano sobre todo el control sobre sus emociones, después de este periodo tan especial, nos devore el amor natural que emana de cada átomo de nuestro ser. Aunque nuestra mayor prioridad en este planeta es sobrevivir y esto nos hace pensar en nosotros mismos la mayoría del tiempo, nuestro lazo de unión con cada ser humano nos hace por naturaleza ser seres sociables que intuyen que la única manera de realmente sobrevivir y experimentar una vida plena es a través de la empatía, la compasión y el apoyo de los unos con los otros sin importar de dónde venimos y hacia dónde vamos.
También hay que ser honestos con la realidad en la que vivimos y que de la cual muchas veces sentimos que perdemos el control, que aunque el concepto de comunidad es algo lógico es algo también difícil de conseguir ya que las personas que nos lideran sean a nivel empresarial o político muchas veces no reflejan los verdaderos valores que implican el ser parte de una comunidad. Con estas personas a las que depositamos toda nuestra confianza rompiendo de manera continuada los valores que realmente facilitan el desarrollo y evolución de la comunidad a la que pertenecemos, nos hundimos en una zona mental donde hablamos de valores pero no nos alineamos a estos porque sentimos con el derecho de pensar que si otra persona de mayor influencia lo hace nosotros también tenemos el derecho de hacerlo.
No pierdo la fe de que un día el sentido de pertenencia de cada ser humano como parte de una gran comunidad no se limite solamente al periodo de festividades navideñas o cualquier otro periodo establecido por la historia que sin ser algo que podamos verificar completamente seguimos con una fe inamovible, sino que esta muestra de nuestra naturaleza original, reflejada en el amor, la compasión y el compartir con otros seres humanos se vuela la tónica de la convivencia en un mundo donde el avance y evolución de uno es el avance y la evolución de todos.
Deseándote éxitos y bendiciones.
Marc Miró
ContinuAvanzando
Marc Miró – enfocado en la transformación personal a través de facilitar el desarrollo de liderazgo personal para así crear las bases del éxito personal
Es la voràgine en la que se vive en estos tiempos, pendientes del reloj y el almaque y estas festividades dejaron de ser espirituales para convertirse en paganas, lamentablemente…