Parece como si nunca nos pudiéramos librar de esos momentos donde sabemos que podemos lograr algo maravilloso pero la sombra de nuestros miedos oscurece la claridad y la energía que tenemos y nos convertimos en la estatua de lo que pudimos ser. Cuando nuestra frustración es lo suficientemente grande encontramos la fuerza y resolución que nos permite mostrar lo que nuestras acciones pueden llegar a crear. La mayoría de las veces aunque lo sentimos no somos capaces de ser conscientes de lo que cambia dentro nuestro cuando somos capaces de tomar acción. Nuestras acciones son la antorcha que con su fuego acaba de convertir nuestros miedos en cenizas que son llevadas por la brisa del tiempo hacia el olvido.
En el momento que tomamos acción, a pesar de nuestro miedo, se produce una nueva química interna que permite llevar a nuestra mente y cuerpo a nuevos niveles de consciencia, a nuevos niveles de claridad y entendimiento de lo que realmente son miedos psicológicos y miedos que ponen en peligro nuestra integridad física. Los primeros son miedos que se crean en la mente pero que en realidad no existen, no pueden causarnos ningún daño físico y los segundos son miedos que pueden traer alguna repercusión negativa a nuestro ser físico y mental. Con una nueva realidad, una nuevo nivel de consciencia mental, somos capaces de dejar de identificarnos con los miedos mentales e iniciar un plan de acción para eliminarlos para siempre.
Nuestra lucha es contra nuestra mente más que contra lo que parece que es real, el miedo, algo que hemos proyectado a través de la creación de una película mental donde todas las posibilidades apuntan a las consecuencias negativas que esta experiencia en la vida mental pueda traer. Nuestra antorcha se crea cuando con nuestra capacidad de ser conscientes de la mentira del miedo creamos una nueva manera de pensar que en consecuencia desarrolla otro estado mental más positivo.
El miedo, con su habilidad en crear parálisis mental y física, es la causa mayor de que los seres humanos no puedan crear la vida que tanto desean, forzando a dejarnos sin desarrollar completamente nuestra capacidad de creación y de vida. Cada acción que tomamos con el objetivo de enfrentar al miedo es una victoria que nos acerca más a poder convertir ese miedo en ceniza, en un polvo que se llevara el viento y que dejará abiertas las puertas a un nuevo mundo, un mundo lleno de posibilidades al alcance de nuestro ser.
Deseándote éxitos y bendiciones.
Marc Miró
ContinuAvanzando
Marc Miró – enfocado en la transformación personal a través de facilitar el desarrollo de liderazgo personal para así crear las bases del éxito personal